Modelos de relaciones hay muchos, cada
hombre y cada mujer tienen el derecho de mantener la relación sentimental que
les venga en gana y establecer el grado de compromiso que consideren; puede durar
horas, noches, semanas, meses o media vida, pero digo yo que partiendo de una buena
comunicación y respetando los acuerdos. Me refiero a que es necesario e
importante empezar por sentirnos bien con nosotros mismos y tener claro que
queremos; pensar en primer lugar si estamos aceptando algo distinto a lo que
verdaderamente necesitamos y queremos, y en segundo lugar compartir esas
reflexiones, se trata de conversar, sentir, y sincerarnos con la otra persona implicada. Comunicación y respeto son
para mí los pilares de una buena relación, de cualquier tipo.
Pienso que buena parte del éxito será rotundo si elegimos bien, si desde el minuto cero queda clarito
cuáles son las intenciones, lo que queremos y necesitamos, lo que estamos dispuestos a dar, y sería también magnífico si evitamos pensar en función de nuestras expectativas. Parece fácil o al menos lógico que sea el primer paso para
una relación con buenos cimientos, pero claro, aparecen nuestros miedos que nos limitan y nos impiden a veces mostrar nuestras necesidades, y entra en juego el
ego, el de uno y el del otro... nos volvemos locos... ¿Por qué
es tan complicado manifestar nuestros deseos y necesidades? Pues porque no nos
conocemos, porque nos saboteamos, porque estamos bastante limitados por
nuestras creencias y patrones adquiridos, principalmente en nuestra infancia, los que rigen nuestra vida; porque eso implica reconocer que somos vulnerables, porque
hay a quien no le interesa exponer ni reconocer según que parcelas de su
"otra vida", porque nos enseñan y educan en la línea de que está feo
pedir y que es mejor servir y agradar a los demás, sin cuestionarnos, porque nos ponemos nuestras
máscaras y nos comportamos como nos hicieron creer un día que éramos y como
los demás esperan que actuemos. Esto por parte de uno, pero a la persona
que tenemos en frente resulta que le sucede lo mismo... quiere esto decir que habrá
momentos en que las parejas somos cuatro!!
No pretendo enamorarme de un cuerpo pero si de una mente,
de la mente de un Hombre (sí, con mayúscula), que sume a mi vida; que me quiera
y me acepte con mis debilidades y mis defectos; con el que comparta valores,
inquietudes e intereses, con una visión de la vida común, con objetivos compartidos y lo
suficiente independiente como para que comprenda que yo también necesito mi
espacio y por tanto espero que él también tenga el suyo, ahhh! y que se deje querer y conocer! Que mira que les cuesta a veces darse a conocer. Y mientras se cruza
conmigo ese Hombre, lo que no pienso es oxidarme, así que prestaré atención y
daré oportunidades a quien considere que la merece, al menos aprenderé de cada
uno de ellos, de la relación, y también de mí porque cada experiencia suma, y
si no pruebas y arriesgas siempre te quedarás con la duda.
Eso sí, hay que saber elegir con quién
complicarse la vida, porque es probable que te la acabes complicando jeje
Y eso sí, fuera expectativas!!